Llegó el día. Siempre respetamos la libertad de Tato, le transmitimos que lo más importante es poder elegir, decidir, actuar en consecuencia acorde a su deseo… y eso sucedió.
El año pasado sintió que era suficiente explicarle a su seño de jardín que su familia estaba formada por la mamá embarazada y su madrina. Este año fue diferente. Le pidió a Triana que fuera a la reunión de padres conmigo y Tinchi, que además aclaráramos que él no tenía papá, que tenía dos mamás y que era feliz. (Pareciera al leer esto que él nos dio letra, nos orientó y… es así, quienes conocen a Tato confirmarán que es absolutamente cierto.)
Y el día llegó y marchamos todos para el cole. Tato se fue al salón y nosotros a la dirección, donde la directora y la docente nos esperaban.
La seño nos empezó a decir las habilidades intelectuales de nuestro hijo, sus vínculos con sus pares, sus dos peleas: una por celos con su mejor amigo (llamado igual que su hermano, ¿casualmente?) y otra con una niña que lo burlaba diciéndole: NO TENES PAPA!!! NO TENES PAPA!!!! (Tato ya nos había contado el episodio) y la angustia de él al no tener la posibilidad de explicarle a esa nena cual era su realidad familiar. Le preguntamos cual era la actitud que tomó ella como docente y realmente nos pareció muy satisfactoria: habló con ambos explicándoles que las familias son todas distintas y siempre debe reinar el respeto.
Hubo unos segundos de tenso silencio. Tinchi estaba a upa de Triana y berreaba con hambre, ella me lo da diciendo: “Hijo, andá a tomar la teta” y el gordito comenzó a mamar hasta quedarse dormido.
Bueno… nos toca hablar a nosotras…
“Tato no tiene papá. Fue concebido por inseminación artificial… él conoce esto, incluso lo ha hablado con sus amigos. El es su hermanito, lo adora… Queremos aclarar que este deseo de tener un hijo no es un deseo mío solamente, sino que fue deseado, esperado, por nosotras dos, que estamos en pareja hace más de10 años.”
(Aquí confieso que casi me desmayo de los nervios!!!!)
Las docentes sonrieron cálidamente y nos dijeron: “Agradecemos que nos hayan contado la realidad de su familia… Tato es un nene muy querido y feliz. Triana es re famosa, la nombra todo el tiempo…”
La reunión siguió su curso, nos enteramos de particularidades de nuestro hijo que nos enorgullecen y la verdad, muchas veces somos nosotros mismos quienes estamos llenos de temores y prejuicios con el resto del mundo, que en ocasiones, nos brinda el respaldo necesario para nuestro andar cotidiano.
Casi me olvidaba! Al día siguente de la reunión, Tato se largó a leer.