Fue lindo encontrar a las viejas caras conocidas, que lo primero que hicieron fue preguntar por Tato, que se había quedado en casa esta vez, descansando.
Fue lindo encontrar caras nuevas: a Marina, a Mariana y a su bella hija; a Sara y a la princesita de casi 5 añitos…
Fue lindo ver a 4 hijos de madres lesbianas disfrutar de sus mamis, reír, jugar, y tuve ganas de que Tato pudiera la próxima, compartir momentos con ellas.
Varios temas fueron surgiendo en un clima informal:
· Lugar físico para las próximas reuniones, ya que cada vez somos más.
· Posibilidad de visibilidad en la próxima marcha para orientar a otras lesbianas que puedan tener el deseo de ser madres.
· Necesidad o no de conservar “muestras” para que futuros hijos sean hermanos consanguíneos.
· Estimulación ovárica/ embarazos múltiples: consecuencias.
· Necesidad de realizar reuniones exclusivamente para los hijos/hijas nuestros, para que vean que hay otros niños con su misma realidad.
· Formarnos teóricamente para las que deseen puedan difundir o hacer visible nuestra realidad.
Seguramente me estoy olvidando de temas, pero descanso en saber que en los otros blogs de mis compañeras, lo que yo me olvide, aparecerá. Porque la sensación esencial que me queda, es que a partir de nuestras subjetividades, nos vamos ensamblando para un mismo fin: Marco legal, cotidianeidad de su realidad para nuestros hijos, conocimiento de diversas cuestiones vinculadas a nuestro tipo de concepción, compartir temores, alegrías, decepciones, todo eso en un lugar, que todas sabemos, que podemos ser escuchadas y comprendidas.
Gracias equipo!!! Hasta la próxima.
Muchas gracias una vez más a las cuatro cálidas anfitrionas, de todas nosotras.